Lista de verificación de Violencia Económica

La violencia económica (también conocida como violencia financiera) es una de las tácticas de la violencia psicológica, cuyo objetivo es controlar a otra persona mediante medios económicos. La violencia económica se considera una forma propia de violencia, aunque también es violencia psicólogica en cierta manera.

No se te permite tener una cuenta bancaria o tarjeta de débito/crédito

No tienes una cuenta bancaria o tarjeta, aunque quieras una. O, tu pareja puede usar tu cuenta bancaria incluso si no te gusta.

Tu dinero y tus gastos están controlados

Compras algo pero debes mantenerlo o mantener su precio en secreto para evitar una discusión. No puedes decidir felizmente qué comprar. Incluso puede que tengas que pedir permiso para comprar algo. Debes mostrar tus transacciones a tu pareja, aunque no quieras.


No puedes decidir qué ropa y cosas comprar para tus hijos ni cuánto gastar. La pensión alimenticia puede ser usada como herramienta de chantaje.

Eres responsable de todos o la mayoría de los gastos

Pagas todo o la mayoría de los gastos de tu hogar diario aunque no ganes más que tu pareja. Tu pareja usa sus ingresos solo para él mismo y sus propios pasatiempos.

Tienes que compensar de manera desagradable porque ganas menos

Debes hacer algo que no quieres solo para compensar el hecho de que tu pareja gana más dinero que tú y paga más de los gastos de su hogar común.

Tu dinero o información personal se usa en contra de tu voluntad

Tu pareja usa tu tarjeta de crédito/débito para sus propios pagos, aunque no te guste.


Tu pareja usa tu información personal para sus compras online aunque no te guste o no le des consentimiento.

Se te impide ganar dinero

Tu pareja dificulta o complica el trabajo para evitar que ganes tu propio dinero. Tener tus propios ingresos te haría más independiente.

Tu pareja toma todas las decisiones económicas por su cuenta

Tu pareja toma decisiones sobre tu vida común y tu hogar por su cuenta, aunque no sea tu voluntad común. Estas decisiones pueden ser sobre préstamos, propiedades, compras mayores, herencias, viajes, etc.


Tus beneficios o los beneficios comunes van a la cuenta de tu pareja, y ellos deciden solos cómo se usan.

Salir rápido
Feedbackexternal link icon