Cómo preguntar sobre situaciones de violencia de género
Puedes pensar que puedes reconocer a una persona que ha sido víctima de violencia o a un perpetrador cuando los ves, pero es crucial recordar que las experiencias de violencia pueden no ser siempre, y en su mayoría no son, visibles.
Puede haber moretones o rasguños que te hagan preocuparte y querer preguntar sobre la violencia. Sin embargo, también puede haber inquietudes incluso sin síntomas claros. Es importante recordar que cada vez que surja una preocupación, se debe preguntar.
Asegúrate de que la persona con la que deseas hablar se encuentre en un entorno seguro y, si estás en contacto de manera remota, que esté sola y no bajo vigilancia.
Explícales qué te ha preocupado y que pueden confiar en ti.
Haz la pregunta de manera directa y sensible. Es su elección si desean hablar sobre el tema.
Si la mujer niega la violencia y sientes que no está siendo honesta, vuelve a compartir con ella lo que te llevó a preguntar al respecto. Dile que sabes que es común que las personas nieguen haber sufrido violencia, incluso si realmente la han experimentado. Asegúrales que pueden cambiar de opinión en cualquier momento, que estás ahí para escuchar y que no las juzgarás.
Si eres una persona cercana, también puedes informarles sobre los lugares donde pueden obtener ayuda si no desean hablar con alguien que conozcan.
Escucha y cree lo que la persona está diciendo.
Puedes preguntar si se siente segura en casa. Si no se siente segura, puedes guiarla a que contacte con los servicios especializados. Si no está en peligro inmediato, puedes informarle sobre los profesionales que están disponibles para ayudarle. Puedes encontrar información en la página de detalles de contacto.